miércoles, 24 de agosto de 2016

Embarazos no deseados, problemática en los adolescentes

La adolescencia es la etapa de la vida donde las personas se comienzan a interesar por el sexo y es tardíamente en la adolescencia donde tienen comienzo las relaciones sexuales.
Esta primera experiencia puede ser un episodio de goce y satisfacción, pero también puede originar inquietud, desengaño y culpa, esto puede deberse a la falta de información sobre el sexo que tienen los adolescentes, a pesar de que vivimos en una sociedad donde la información y la educación sexual forma parte de nuestro diario vivir, entre los adolescentes existen ideas erróneas y absurdas acerca de la sexualidad.
Esta falta de conocimiento o la presencia de conocimiento erróneo pueden provocar embarazos no deseados.
El embarazo en la adolescencia es muy pocas veces deseado y cuando se produce ninguna de las salidas que se presentan como posibles resulta ser satisfactoria.
El aborto no es una buena experiencia, pero asumir una maternidad no es tampoco una elección posible para jóvenes que no están preparadas tanto física como psicológica mente.
Aun así el aborto en muchas ocasiones puede ser la base profunda de una depresión, esta depresión es muy difícil de sobrellevar porque son experiencias que no permanecen en la consciencia sino que quedan latentes en el inconsciente que se recrearan ante cualquier situación semejante. Ante esta situación de desequilibrio en la vida de la adolescente, es muy importante el apoyo en todo momento de los padres o personas de confianza que le den apoyo y seguridad a la adolescente. Es importante que la joven se sienta arropada y más en el supuesto caso de complicaciones o trastornos que deterioren la salud tanto física como mental de la joven.
Una mujer que se somete a un aborto se arriesga a sufrir infecciones graves y hasta puede quedar estéril por lesiones irreversibles.
Los jóvenes creen que un embrión no es una persona, sin embargo desde la concepción una nueva vida siente y cualquier pensamiento de rechazo que reciba comprometerá su desarrollo y su futuro; y si no le permiten nacer quedará para siempre en las conciencias de sus progenitores.

                                          ¡SI A LA VIDA, A EL ABORTO!